LAS MASCARAS DE NYARLATHOTEP- CC- 4a5
INTERLUDIO: EL MUNDO ES UN PAÑUELO
Miguel Ángel (3).......James Curtnert............Cazador
Pablo (1).................Jason Dallas................Mercenario
Adrián (1)................Sofía Wells (Srta.)........Parapsicóloga (amiga de Jackson Elías)
Dani (5)..................Adrian Eastwood..........Agente de negocios de importación-exportación
Migu3l (4)...............Frank Donahew.............Arqueólogo del Museo Egipcio de El Cairo
Lvis (6)...................Steve Donahew............Antropólogo del Museo Egipcio de El Cairo y profesor de Universidad
(N. del G.: Aquí los jugadores se esperaban un infierno en el barco, como pasó en el Mauritania. Nada más lejos de la realidad. El viaje será tranquilo y apacible, y además les servirá para reenfocar la investigación.)
Los investigadores se reúnen con Eastwood en Mombasa y embarcan el día 13 de Mayo. En el momento de despedida de los personajes que se quedan (Sam Mariga y Kipchirchir), mientras se despiden desde el barco, ya a lo lejos, Steve Donahew ve que unos negros de aspecto bastante dudoso y con las cintas rojas de la Secta de la Lengua Sangrienta se acercan a los infortunados personajes en el puerto. Desgraciadamente, los movimientos de Steve a esa distancia pasan tan solo como una efusiva despedida...
En la cena que celebra el capitán para conmemorar el viaje (Eastwood como importante hombre de negocios consigue un puesto en la mesa del capitán), se encuentran con nada más y nada menos que el profesor Cowles de la Universidad de Sydney. El profesor Cowles tiene la costumbre de escuchar con entusiasmo y de reunir historias relacionadas con costumbres extrañas (N. del G: esto ya ha hecho que tenga problemas con los altos cargos de la Universidad, que piensan que anda con malas compañías). Cowles cree en la brujería y tiene una mente abierta ante cosas como los monstruos o las ciudades subterráneas, a pesar de que siempre quiera pruebas concretas de su existencia. Es un hombre corpulento y excéntrico, con una barba de color rojo brillante. El profesor se dirige a Sydney, de vuelta desde Arkham.
El profesor Cowles es, en la actualidad, miembro de la Sociedad Locksley de Esoterismo Polinesio de la Universidad Miskatonic (Arkham, Massachusetts). Hace unos meses el profesor recibió cuatro fotografías y un diario (éste lo ha dejado en su casa, en Sydney), que le fueron enviados por el albacea testamentario de la señora Emma MacWhirr de Puerto Hedland, Australia Occidental, el sr. Mackenzie. Las fotos fueron tomadas en 1921 por el marido de la señora MacWhirr, geólogo de profesión (y también fallecido, por gripe). Muestran unas dunas arenosas sin fin, entre las que se pueden ver unas columnas talladas y unos bloques de piedra también tallada. La posición es 22°3' 14" Sur y 125°0'39" Oeste, en medio del gran desierto de Australia Occidental. Esto llama la atención a los investigadores, porque uno de los vértices del triángulo del mapa que descubrieron en Egipto estaba precisamente en esta posición.
Intrigado por las fotografías, el profesor Cowles ha decidido enviar una expedición conjunta Sydney/Arkham al gran desierto. Pero el dinero necesario no se consigue de la noche a la mañana y no sin razón. Antes de que pueda publicar algo, el profesor Cowles debe dirigir un pequeño equipo de inspección hasta el lugar y volver con pruebas concluyentes. No será hasta ese momento en que los académicos de Arkham estarán dispuestos a abandonar las clases y otros proyectos para embarcar con destino a Australia.
Muestra a los investigadores unas siniestras anotaciones encontradas en el diario de MacWhirr, que demuestran la necesidad de tomar precauciones poco corrientes. Ofrece pagar a cada investigador 300 dólares americanos por mes, con todos los gastos pagados, si le acompañan hasta el desierto y luego de nuevo a Arkham (un viaje que puede durar entre tres y cuatro meses). Cowles les proporcionará el equipo y los guías necesarios, o hará los arreglos necesarios para conseguirlos; quiere que los personajes hagan de guardianes contra los aborígenes de malas intenciones y contra cualquier tipo de extraños seres descritos (o no) en las anotaciones del diario de MacWhirr. Tiene la sospecha de que los conocimientos especiales de los investigadores pueden llegar a ser de gran ayuda. Por otra parte, Cowles promete a los personajes que les permitirá publicar por separado sus sensacionales experiencias en lo que él llama "publicaciones no académicas de dudosa reputación que pagan sorprendentes sumas de dinero" por historias reales sobre lo extraño.
En Australia pararán en Sydney (donde obtendrán el equipo y más ayudantes), luego irán en vapor costero hasta Perth y de allí a Puerto Hedland. Obviamente, los investigadores aceptan la propuesta de unirse a Cowles para explorar el lugar. Por su parte, Eastwood ofrece al profesor encargarse de la logística para llevar de vuelta a Arkham todas las evidencias recogidas durante la investigación.
A lo largo del viaje Cowles se reúne con los personajes, hacen planes e intercambian información. El profesor les proporciona los siguientes datos (además de todo lo que dijo ya el Dr. Kafour): Cowles les habla de la Secta del Murciélago de la Arena. Él dice que está definitivamente extinta. Se la identificaba con una espiral abierta. Puesto que era una secta aborigen australiana, no había ningún lugar en concreto o construcción o templo central que asociar a la secta (a diferencia de la Secta de la Lengua Sangrienta o la Hermandad del Faraón Negro). Una parte regular de los ritos era que sus miembros meditasen y fueran hipnotizados ante una representación de la espiral abierta que iba siendo hecha girar por el acólito que dirigía el ritual. Había también una señal de reconocimiento: las dos manos se abren, con las palmas extendidas hacia afuera y los pulgares se cruzan y arquean, imitando a alas y colmillos.
Los investigadores se reúnen con Eastwood en Mombasa y embarcan el día 13 de Mayo. En el momento de despedida de los personajes que se quedan (Sam Mariga y Kipchirchir), mientras se despiden desde el barco, ya a lo lejos, Steve Donahew ve que unos negros de aspecto bastante dudoso y con las cintas rojas de la Secta de la Lengua Sangrienta se acercan a los infortunados personajes en el puerto. Desgraciadamente, los movimientos de Steve a esa distancia pasan tan solo como una efusiva despedida...
En la cena que celebra el capitán para conmemorar el viaje (Eastwood como importante hombre de negocios consigue un puesto en la mesa del capitán), se encuentran con nada más y nada menos que el profesor Cowles de la Universidad de Sydney. El profesor Cowles tiene la costumbre de escuchar con entusiasmo y de reunir historias relacionadas con costumbres extrañas (N. del G: esto ya ha hecho que tenga problemas con los altos cargos de la Universidad, que piensan que anda con malas compañías). Cowles cree en la brujería y tiene una mente abierta ante cosas como los monstruos o las ciudades subterráneas, a pesar de que siempre quiera pruebas concretas de su existencia. Es un hombre corpulento y excéntrico, con una barba de color rojo brillante. El profesor se dirige a Sydney, de vuelta desde Arkham.
El profesor Cowles
El profesor Cowles es, en la actualidad, miembro de la Sociedad Locksley de Esoterismo Polinesio de la Universidad Miskatonic (Arkham, Massachusetts). Hace unos meses el profesor recibió cuatro fotografías y un diario (éste lo ha dejado en su casa, en Sydney), que le fueron enviados por el albacea testamentario de la señora Emma MacWhirr de Puerto Hedland, Australia Occidental, el sr. Mackenzie. Las fotos fueron tomadas en 1921 por el marido de la señora MacWhirr, geólogo de profesión (y también fallecido, por gripe). Muestran unas dunas arenosas sin fin, entre las que se pueden ver unas columnas talladas y unos bloques de piedra también tallada. La posición es 22°3' 14" Sur y 125°0'39" Oeste, en medio del gran desierto de Australia Occidental. Esto llama la atención a los investigadores, porque uno de los vértices del triángulo del mapa que descubrieron en Egipto estaba precisamente en esta posición.
Intrigado por las fotografías, el profesor Cowles ha decidido enviar una expedición conjunta Sydney/Arkham al gran desierto. Pero el dinero necesario no se consigue de la noche a la mañana y no sin razón. Antes de que pueda publicar algo, el profesor Cowles debe dirigir un pequeño equipo de inspección hasta el lugar y volver con pruebas concluyentes. No será hasta ese momento en que los académicos de Arkham estarán dispuestos a abandonar las clases y otros proyectos para embarcar con destino a Australia.
Muestra a los investigadores unas siniestras anotaciones encontradas en el diario de MacWhirr, que demuestran la necesidad de tomar precauciones poco corrientes. Ofrece pagar a cada investigador 300 dólares americanos por mes, con todos los gastos pagados, si le acompañan hasta el desierto y luego de nuevo a Arkham (un viaje que puede durar entre tres y cuatro meses). Cowles les proporcionará el equipo y los guías necesarios, o hará los arreglos necesarios para conseguirlos; quiere que los personajes hagan de guardianes contra los aborígenes de malas intenciones y contra cualquier tipo de extraños seres descritos (o no) en las anotaciones del diario de MacWhirr. Tiene la sospecha de que los conocimientos especiales de los investigadores pueden llegar a ser de gran ayuda. Por otra parte, Cowles promete a los personajes que les permitirá publicar por separado sus sensacionales experiencias en lo que él llama "publicaciones no académicas de dudosa reputación que pagan sorprendentes sumas de dinero" por historias reales sobre lo extraño.
En Australia pararán en Sydney (donde obtendrán el equipo y más ayudantes), luego irán en vapor costero hasta Perth y de allí a Puerto Hedland. Obviamente, los investigadores aceptan la propuesta de unirse a Cowles para explorar el lugar. Por su parte, Eastwood ofrece al profesor encargarse de la logística para llevar de vuelta a Arkham todas las evidencias recogidas durante la investigación.
A lo largo del viaje Cowles se reúne con los personajes, hacen planes e intercambian información. El profesor les proporciona los siguientes datos (además de todo lo que dijo ya el Dr. Kafour): Cowles les habla de la Secta del Murciélago de la Arena. Él dice que está definitivamente extinta. Se la identificaba con una espiral abierta. Puesto que era una secta aborigen australiana, no había ningún lugar en concreto o construcción o templo central que asociar a la secta (a diferencia de la Secta de la Lengua Sangrienta o la Hermandad del Faraón Negro). Una parte regular de los ritos era que sus miembros meditasen y fueran hipnotizados ante una representación de la espiral abierta que iba siendo hecha girar por el acólito que dirigía el ritual. Había también una señal de reconocimiento: las dos manos se abren, con las palmas extendidas hacia afuera y los pulgares se cruzan y arquean, imitando a alas y colmillos.
El símbolo de la antigua Secta del Murciélago de la Arena
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