LAS MASCARAS DE NYARLATHOTEP - CC - 6.06
NUEVA CHINA
Miguel Ángel (1).......Josefina Pérez.............Ocultista
Pablo (1).................Jason Dallas................Mercenario
Adrián (1)................Sofía Wells (Srta.)........Parapsicóloga (amiga de Jackson Elías)
Migu3l (5)................Kipchirchir...................Guía keniata
Dani (7)...................Choi Li.......................Ayudante del Museo de Shangai
Lvis (7)....................John Fraxon................Científico químico
Los investigadores procuran pasar desapercibidos y salir lo menos posible mientras esperan varios días hasta que "Brass" vuelve a contactar con ellos. Les da la dirección de un almacén supuestamente abandonado donde se podrán reunir con él y también con Chu Min, Mu Hsien y algunos hombres de Acción Firme. Ostensiblemente vacío y junto a una fundición convenientemente ruidosa, las puertas del almacén están cerradas y las ventanas tapadas con tablones; los miembros del grupo entran sigilosamente por una puerta trasera provista de un fuerte candado, de uno en uno y de dos en dos. Hay una guardia de tres miembros del grupo vigilando la entrada y la armería.
La reunión es bastante productiva. Mu Hsien asegura que sólo ha sido encontrada una fracción de la cifra total de víctimas de la Orden, cuyo poder no deja de crecer cada día; se ha vuelto fácil matar en China. Mu cree que la Orden desea traer a la diosa a la Tierra y que el primer paso, un envenenamiento o ruptura del cielo, tiene que suceder pronto. Tras alterar el cielo, al menos un año debe transcurrir antes de que el mundo quede mancillado por esos seres demoníacos, las mismísimas estrellas estén en posición y los terribles nombres del panteón de la diosa oscura a la que adora la Orden, Cthulhu, Nyogtha, Yog-Sothoth y Azathoth vuelvan a ser adorados. Mu señala que el uso del antiguo conocimiento del Ojo de Luz y de Oscuridad puede prevenir tan trágicos sucesos, pero la traducción y estudio de Los Siete Libros de Hsan aún no están completos, y ninguna acción debe emprenderse hasta adquirir dicho conocimiento.
Por su parte, Brady presenta a los investigadores a Chu Min, líder de Acción Firme, una de las facciones de Nueva China, una organización parapolicial secreta, que consiste en unos 200 hombres y mujeres jóvenes chinos, entre los que hay estudiantes, vendedores, dependientes de comercio, obreros, policías, funcionarios de bajo rango e incluso maestros, y cuyo objetivo es lanzar una campaña contra los elementos más corruptos de Shangai utilizando técnicas directas: bombas y asesinatos.
Aunque diversas facciones de Shangai a veces cometen actos terroristas, las organizaciones políticas formales tienen objetivos que son imposibles de alcanzar mediante el terror, puesto que tales actividades acaban por amenazar a sus organizaciones. Sin embargo, el grupo de Chu Min está respaldado económicamente por un acaudalado radical, Sung Lee, y por tanto no necesita programas, planes o compromisos. El lema del grupo, denominado las Cuatro Firmezas: Estudio firme, Creencias firmes, Práctica firme y Acción firme es indicativo de la escasa sutileza de Nueva China. En sus mítines masivos, Nueva China denuncia a todo y a todos, colocándose los blancos de sus iras en una lista de enemigos que se hace más larga día a día, para cuando llegue el momento de pasar factura.
La mayor parte de la gente que milita en Nueva China lo hace para desfogarse, pero la facción liderada por Chu (Acción Firme) está dedicada a la violencia y sus miembros se entrenan sin cesar en las artes marciales, en tácticas de guerrilla y en el uso de armas.
Para coger práctica, la mayoría de sus miembros se enrolan en bandas locales o con señores de la guerra durante algunos meses o hasta un año. Bien entrenados por un graduado de Whampoa y por Jack Brady, y con experiencia en combate, Acción Firme tiene un potencial formidable, más como un grupo de comandos que como una banda de anarquistas. Además de abundantes fusiles y pistolas, poseen dos ametralladoras del calibre .30, granadas de mano, un mortero de 60 mm y tanta dinamita y detonadores como deseen, de fuentes americanas en el mercado negro de las Filipinas.
Miguel Ángel (1).......Josefina Pérez.............Ocultista
Pablo (1).................Jason Dallas................Mercenario
Adrián (1)................Sofía Wells (Srta.)........Parapsicóloga (amiga de Jackson Elías)
Migu3l (5)................Kipchirchir...................Guía keniata
Dani (7)...................Choi Li.......................Ayudante del Museo de Shangai
Lvis (7)....................John Fraxon................Científico químico
Los investigadores procuran pasar desapercibidos y salir lo menos posible mientras esperan varios días hasta que "Brass" vuelve a contactar con ellos. Les da la dirección de un almacén supuestamente abandonado donde se podrán reunir con él y también con Chu Min, Mu Hsien y algunos hombres de Acción Firme. Ostensiblemente vacío y junto a una fundición convenientemente ruidosa, las puertas del almacén están cerradas y las ventanas tapadas con tablones; los miembros del grupo entran sigilosamente por una puerta trasera provista de un fuerte candado, de uno en uno y de dos en dos. Hay una guardia de tres miembros del grupo vigilando la entrada y la armería.
La reunión es bastante productiva. Mu Hsien asegura que sólo ha sido encontrada una fracción de la cifra total de víctimas de la Orden, cuyo poder no deja de crecer cada día; se ha vuelto fácil matar en China. Mu cree que la Orden desea traer a la diosa a la Tierra y que el primer paso, un envenenamiento o ruptura del cielo, tiene que suceder pronto. Tras alterar el cielo, al menos un año debe transcurrir antes de que el mundo quede mancillado por esos seres demoníacos, las mismísimas estrellas estén en posición y los terribles nombres del panteón de la diosa oscura a la que adora la Orden, Cthulhu, Nyogtha, Yog-Sothoth y Azathoth vuelvan a ser adorados. Mu señala que el uso del antiguo conocimiento del Ojo de Luz y de Oscuridad puede prevenir tan trágicos sucesos, pero la traducción y estudio de Los Siete Libros de Hsan aún no están completos, y ninguna acción debe emprenderse hasta adquirir dicho conocimiento.
Por su parte, Brady presenta a los investigadores a Chu Min, líder de Acción Firme, una de las facciones de Nueva China, una organización parapolicial secreta, que consiste en unos 200 hombres y mujeres jóvenes chinos, entre los que hay estudiantes, vendedores, dependientes de comercio, obreros, policías, funcionarios de bajo rango e incluso maestros, y cuyo objetivo es lanzar una campaña contra los elementos más corruptos de Shangai utilizando técnicas directas: bombas y asesinatos.
Aunque diversas facciones de Shangai a veces cometen actos terroristas, las organizaciones políticas formales tienen objetivos que son imposibles de alcanzar mediante el terror, puesto que tales actividades acaban por amenazar a sus organizaciones. Sin embargo, el grupo de Chu Min está respaldado económicamente por un acaudalado radical, Sung Lee, y por tanto no necesita programas, planes o compromisos. El lema del grupo, denominado las Cuatro Firmezas: Estudio firme, Creencias firmes, Práctica firme y Acción firme es indicativo de la escasa sutileza de Nueva China. En sus mítines masivos, Nueva China denuncia a todo y a todos, colocándose los blancos de sus iras en una lista de enemigos que se hace más larga día a día, para cuando llegue el momento de pasar factura.
La mayor parte de la gente que milita en Nueva China lo hace para desfogarse, pero la facción liderada por Chu (Acción Firme) está dedicada a la violencia y sus miembros se entrenan sin cesar en las artes marciales, en tácticas de guerrilla y en el uso de armas.
Para coger práctica, la mayoría de sus miembros se enrolan en bandas locales o con señores de la guerra durante algunos meses o hasta un año. Bien entrenados por un graduado de Whampoa y por Jack Brady, y con experiencia en combate, Acción Firme tiene un potencial formidable, más como un grupo de comandos que como una banda de anarquistas. Además de abundantes fusiles y pistolas, poseen dos ametralladoras del calibre .30, granadas de mano, un mortero de 60 mm y tanta dinamita y detonadores como deseen, de fuentes americanas en el mercado negro de las Filipinas.
Chu Min, líder de Acción Firme
Chu mantiene una tapadera como almacenero pero en realidad sólo trabaja para Acción Firme. Antes era policía y conoció a Jack Brady hace años, como oponente menor en una campaña anticorrupción. Tras retirarse de la policía, Chu fue reclutado por Sung Lee y a su vez reclutó a Brady quien tenía experiencia, era de fiar y nada llamativo. Cuando Brady proporcionó pruebas de las horribles actividades de la secta consiguió la aquiescencia de Acción Firme para atacar el cuartel general de los sectarios. (N. del G.: Ninguno de los radicales, ni siquiera Brady, comprende el alcance del tremebundo plan que se prepara en la isla del Dragón Gris ni las poderosas fuerzas que la protegen.)
Con Mu Hsien apunto de concluir la traducción de Los Siete Libros, el plan de asalto ya está ideado. Lo ideal es lanzar el asalto en una noche tranquila y con el cielo cubierto, con marea alta, después de que el yate de Ho Fong (que Acción Firme vigila constantemente) haya zarpado hacia la isla, lo que indica que está apunto de tener lugar algún ritual. El conocimiento de la secta de Mu Hsien le lleva a calcular que durante un ritual o justo después de uno de ellos habrá pocos o ningún sectario de guardia.
Ahora los investigadores sólo deben concentrarse en no meterse en problemas hasta el momento en que llegue el que debería ser el golpe de gracia contra las sectas y el plan de Nyarlathotep.
Con Mu Hsien apunto de concluir la traducción de Los Siete Libros, el plan de asalto ya está ideado. Lo ideal es lanzar el asalto en una noche tranquila y con el cielo cubierto, con marea alta, después de que el yate de Ho Fong (que Acción Firme vigila constantemente) haya zarpado hacia la isla, lo que indica que está apunto de tener lugar algún ritual. El conocimiento de la secta de Mu Hsien le lleva a calcular que durante un ritual o justo después de uno de ellos habrá pocos o ningún sectario de guardia.
Ahora los investigadores sólo deben concentrarse en no meterse en problemas hasta el momento en que llegue el que debería ser el golpe de gracia contra las sectas y el plan de Nyarlathotep.
No hay comentarios:
Publicar un comentario