La Biblioteca de Pnakotos recibe 1041 visitas

Desde que instalé el contador el 6 de Junio por la tarde, ha pasado poco más de una semana hasta que el blog ha alcanzado las 1041 visitas.
Me alegro de que me hayáis dado tan buena acogida, y espero veros aún más a menudo.
A lo mejor te preguntas por qué celebrar las 1041 visitas...



¿Sabes lo que es la gematría?

La Gematría consiste esencialmente en asignar valores numéricos a las letras del alfabeto, de lo cual se derivan valores numéricos para las palabras, que se asocian entonces simbólica o místicamente con otras palabras que tengan valores numéricos parecidos. Muchos alfabetos antiguos no poseían caracteres escritos especiales para los números, sino que utilizaban las letras del alfabeto para representar los números cuando tenían que escribirlos. El Hebreo es uno de ellos y de aquí se deriva la costumbre de sumar los valores numéricos de las letras de cada palabra, obteniendo un valor numérico para la palabra. Por ejemplo, si A = 1, B = 2, C = 3, D = 4 y E = 5, el valor numérico de la palabra inglesa 'bad' (= malo) sería B = 2 + A = 1 + D = 4, es decir, 7. Por otra parte, la palabra 'be' (= ser) valdría B = 2 + E = 5, es decir, 7 también. Por tanto, y como quiera que los valores numéricos de 'mal' y 'ser' pueden asocirse místicamente, podríamos concluir que la existencia (el ser) es intrínsecamente maléfica.

El uso principal de este sistema por parte de los místicos de la cabala judía era determinar el significado alegórico o místico oculto en los pasajes oscuros de las Sagradas Escrituras. Si un pasaje era difícil de interpretar, el cabalista estudiaba los valores numéricos de las palabras especialmente místicas o espirituales, descubriendo asi el significado secreto del pasaje leyendo en él el nuevo significado de las palabras con valores numéricos equivalentes. Al cabo del tiempo, empezaron a desarrollarse significados ocultos para el conjunto de las Sagradas Escrituras, extendiéndose el sistema a otras obras mágicas y religiosas. Los ocultistas cristianos del renacimiento adoptaron variaciones de los métodos gemátricos, reformando todo el sistema y dándole una interpretación cristiana, inyectándolo después en numerosos sistemas místicos y mágicos.

Volviendo al judaismo, éste desarrolló toda una tradición mística religiosa alrededor de tales interrelaciones entre las letras del alfabeto hebreo tal y como aparecen en el Antiguo Testamento. Esta tradición mística de la Gematría se entroncó en el misticismo de la Cabala (también llamada Kábala, Kabbala, Cabbala, etc., que en Hebreo significa 'cadena de tradición que se transmite'). Aunque a veces se confunde la Gematría con el cabalismo, técnicamente es sólo una parte de una tradición cabalística mucho más amplia.

En los círculos cabalísticos tradicionales, hay al menos 72 métodos para calcular los valores numéricos de las palabras, aunque diferentes escuelas tienden a aceptar algunos métodos y a rechazar otros, o a disponer de variaciones especiales de los métodos básicos, pero se podría decir que existen cinco métodos fundamentales.



Pues bien, la forma hebrea más obvia para la palabra "Cthulhu" sería "C-D-W-L-H" (la pronunciación correcta de C-D-W-L-H es KaDuLHu, con lo cual parece que queda claro que es una forma hebrea de "Cthulhu"). El auténtico significado de esta palabra sólo puede comprenderse mediante la Gematría, a través de cada uno de los cuales examinaremos el valor de la palabra C-D-W-L-H.

Según el método del 'número pequeño', Cthulhu tiene un valor de 26, o sea C = 8 + D = 4 + W = 6 + L = 3 + H = 5.
Si examinamos el significado oculto del primer número 26, veremos que no se trata de un número intrínsecamente perverso puesto que es igual al número correspondiente al nombre hebreo de Dios, Jehovah, o más correctamente pronunciado, Yahweh, del cual las consonantes gemátricas son Y-H-W-H = 10 + 5 + 6 + 5 = 26. Así pues, el valor de Cthulhu por el método del número pequeño es igual al de Yahweh por el método básico. Esta podría ser una buena señal, puesto que significaría que Cthulhu es una parte de Dios, o un nombre alternativo de El. Por otra parte, también podría ser algo que intentara reemplazar a Dios y, como veremos más adelante, ésta es la interpretación correcta.

Según el método básico, Cthulhu tiene un valor gemátrico de 53, o sea C = 8 + D = 4 + W = 6 + L = 30 + H = 5.
Si examinamos el significado oculto del 43, veremos que es una unidad superior al valor de Y-H-W-H calculado mediante el método del rellenado. Queda así claro que C-D-W-L-H es algo que intenta reemplazar a Dios puesto que su valor es 26, igual que el de éste, y que también intenta dominarle, puesto que otro de sus valores es 53, uno más que el 52 de Yahweh. Nótese también que 26 + 26 es también igual a 5 (por el método del número pequeño).

Según el método de las series, que consiste en sumar el valor de todas las letras precedentes suma 187, o sea C = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 + 8 = 36 + D = 1 + 2 + 3 + 4 = 10 + W = 1+ 2 + 3 + 4 + 5 + 6 = 21 + L = 105 + H = 1 + 2 + 3 + 4 + 5 = 15.
De igual forma, el 187 que obtenemos por el método 4 es superior en 1 unidad al valor de Yahweh obtenido por el método 3, que es 186. Aquí de nuevo el número de Cthulhu intenta sobrepasar y reemplazar al de Yahweh.

El método del rellenado nos indica que C se deletrea C-Y-T = 8 + 10 + 400 = 418; D se deletrea D-L-T = 4 + 30 + 400 = 434; W se puede deletrear de tres maneras diferentes (ver la discusión más adelante), de las que escogemos W-Y-W = 6 + 10 + 6 = 22; L se deletrea L-M-D = 30 + 40 + 4 = 74; H también puede deletrearse de diferentes maneras, y la que usamos aquí es H-H = 5 + 5 = 10. Si sumamos todo esto, nos da un total de 958, y a continuación invocamos la regla especial por la que podemos sumar al total el número de letras de la palabra, que en este caso son cinco, lo que nos deja un 963 para Cthulhu.
Además, en Hebreo hay otros tres nombres de Dios, basados en la raíz '-L (que significa 'fuerte' o 'poderoso'). Así, tenemos '-L-H-I-M, que se pronuncia Elohim, '-L pronunciado El, y '-L-W-H pronunciado Eloah. Si cogemos el valor gemátrico del último de los tres nombres, Eloah o 'L-W-H, según el método de los cuadrados, tenemos 1x1 = 1 + 30x30 = 900 + 6x6 = 36 + 5x5 = 25, lo cual arroja un total de 962, de nuevo una unidad menos que el valor de Cthulhu por este método.

Así, la Gematría no hace más que confirmar que Cthulhu es un ser que intenta reemplazar o vencer a Dios, puesto que el 26 de Cthulhu es igual al 26 de Yahweh, el 53 es mayor que el 52, el 187 es mayor que el 186 y el 963 es más que el 962.



Sumando el valor del cuadrado de cada letra nos sale 1041, es decir C = 8x8 = 64 + D = 4x4 = 16 + W = 6x6 = 36 + L = 30x30 = 900 + H = 5x5 = 25.
En la Biblia, los poderes de la Oscuridad se representan de vez en cuando mediante una bestia monstruosa denominada 'Leviatán' (ver Job 41:1, Salmos 74:14 y 204:26, e Isaías 27:1). Según estos pasajes, el Leviatán es un monstruo que vive en el mar, que se opone a Dios, y que ha sido capturado por éste. En Hebreo, Leviatán se escribe L-W-Y-T-N, que tiene un valor básico según el método 1 de 30 + 6 + 10 + 400 + 700 = 1146. Utilizando la regla especial mencionada en el apéndice 1, se puede añadir 1, lo que nos deja el total en 1147. Tal y como se ha dicho en el párrafo anterior, uno de los nombres de Dios es 'L, que según el método del rellenado tiene un valor de 1 +105 = 106. Ahora bien, si restamos el valor de Dios (106) del valor del Leviatán (1147), nos da 1041, que es el valor exacto de C-D-W-L-H por el método de los cuadrados. La interpretación ocultista de este hecho es la siguiente: En el Torah, el Leviatán es derrotado por Dios quien, por tanto, salva a la humanidad de los maléficos poderes de aquél. Sin embargo, si el poder de Dios se quita del Leviatán, es decir, si se restan sus valores gemátricos, el resultado es el valor gemátrico de Cthulhu. Cthulhu es, por tanto, el Leviatán si se retira el poder controlador de Dios. Es el poder de la Oscuridad desatado, ¡el Leviatán desencadenado!



Esta magnífica información, que siempre me ha parecido fascinante, la saqué del artículo "la ciencia cabalística de la gematría" y de la aventura "La Ciudad sin Nombre", ambos de William Hamblin (publicados por Joc Internacional en el suplemento La Maldición de los Chthonians).

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